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Seguridad de funcionamiento para su vehículo eléctrico
Sistema de frenos fiable
El sistema de frenos de los vehículos híbridos y eléctricos debe soportar cargas considerablemente mayores en comparación con el motor de combustión convencional.
Esto se debe, por un lado, a que el motor eléctrico también funciona como freno, obteniendo energía para la batería del coche, con lo que el sistema de frenos mecánico se utiliza menos. Este proceso se denomina «recuperación». Debido a que el freno se utiliza con menos frecuencia, aparecen claros indicios puntuales de corrosión en los discos y forros de freno, que repercuten negativamente en la seguridad y el funcionamiento del sistema de frenos. Por este motivo, en el marco del mantenimiento de los frenos, debe encargar regularmente que se examinen posibles daños del sistema de frenos y su seguridad de funcionamiento . Una buena protección contra la corrosión es esencial, especialmente en el caso de los vehículos eléctricos.
Por otro lado, la diferencia de peso de los vehículos híbridos y eléctricos en comparación con los vehículos de combustión convencionales es un factor decisivo. Debido a que se necesita una batería para la propulsión, el vehículo eléctrico carga con un peso adicional. Los frenos también están sometidos a un gran esfuerzo debido a la notablemente superior capacidad de aceleración. En caso de emergencia, tienen que detener de forma fiable un peso elevado bajo calor extremo.
Transmisión a prueba de fallos
Los vehículos con componentes eléctricos de propulsión no pueden prescindir todavía de los aceites para caja de cambios. Pero también aquí rigen requisitos especiales al lubricante. La caja de cambios de un vehículo eléctrico funciona en gran medida sin cambio de marchas y solo tiene una o dos. Debido a las muy elevadas temperaturas que pueden producirse durante la marcha, el aceite para caja de cambios está sometido a una gran carga física y térmica. La resistencia a la oxidación y al calor extremadamente alta del aceite del cambio es esencial para poder garantizar a largo plazo el funcionamiento del cambio sin sufrir daños.
óptima capacidad de rendimiento de la batería
Para poder aprovechar el alto grado de rendimiento de los vehículos híbridos y eléctricos, es necesario garantizar que los componentes sensibles a la temperatura, como el motor eléctrico y la electrónica de potencia, tengan una determinada temperatura de servicio. En la batería de iones de litio montada, esta se encuentra entre los 15 °C y 40 °C. Para el funcionamiento óptimo de la batería, se debe poder garantizar esta estrecha franja de temperaturas tanto en condiciones exteriores cálidas como frías.
Sistema de combustible limpio para vehículos híbridos
Los vehículos híbridos modernos se caracterizan por su consumo de combustible extremadamente bajo. La razón se encuentra en que el motor de combustión interna de un vehículo híbrido solo se activa en caso necesario para apoyar. De este modo, el combustible permanece en el depósito durante un tiempo relativamente largo.
Lo que a primera vista parece positivo, si nos fijamos detenidamente, también conlleva riesgos. Porque el muy bajo consumo provoca inevitablemente el envejecimiento de la gasolina en el depósito. Se producen ácidos corrosivos que propician el desgaste de todo el sistema de combustible. Otro efecto negativo es la formación de polímeros. Estos sedimentos espesos y resinosos no se disuelven en el combustible, lo que puede obstruir las bombas, los conductos o los inyectores.
Cuidado del automóvil para preservar su valor
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