• 16/10/2018

Cuando las marchas se atascan

El aditivo para aceite del cambio de LIQUI MOLY es la solución económica

Octubre de 2018 - Precisamente ocurre con frecuencia en vehículos con cierta edad: El cambio de marchas se atasca. La razón suele ser el desgaste en la caja de cambios. La reparación mecánica costaría una fortuna. Pero hay alternativas: El especialista de aditivos alemán LIQUI MOLY tiene el Aditivo para aceite del cambio, un suplemento para el aceite para caja de cambios, que frecuentemente acaba con los problemas de las cajas manuales.

Es tan simple como añadir Aditivo para aceite del cambio al aceite para caja de cambios. Así reduce la fricción y mejora el cambio de marchas. Contiene el lubricante sólido MoS2, que se encarga de nivelar las irregularidades de las superficies metálicas y reducir así el desgaste. Además, de esta manera se reduce la carga térmica en la caja de cambios. Porque no contiene ningún componente que tenga efectos químicamente corrosivos que pudieran atacar a los delicados metales no ferrosos de la caja de cambios. Por esta razón, y gracias a sus estupendas características anti-desgaste, se puede aplicar a pesar de todo en automóviles clásicos y también en vehículos nuevos que disponen de cajas de cambios sincronizadas.

Aditivo para aceite de cambio no es una pócima milagrosa que hace desaparecer los grandes defectos mecánicos. Pero en gran cantidad de casos puede solucionar el problema, o reducir los síntomas o frenar en buena medida el avance de los defectos. La mayor de las ventajas radica en su fácil y económica aplicación. Con ello se puede evitar llevar a cabo una laboriosa y costosa diagnosis, sin correr riesgo alguno; también se puede aplicar el aditivo de manera preventiva. O bien el problema se soluciona y se acaban las preocupaciones. O en caso de que persista el problema, no se ha perdido nada prácticamente, ya que el tiempo y los costes son mínimos. Pero hay muchas posibilidades de que se pueda ahorrar tiempo y dinero para la diagnosis y la reparación mecánica.

Con ello no sólo sale beneficiado el propietario del vehículo. También el taller que ofrece este servicio sale bien parado. Por un lado, puede generar ventas con clientes que se hubieran quedado muy sorprendidos ante los enormes costes de una reparación. Y, por otro lado, el taller destaca por su competencia técnica al ofrecer una alternativa económica. La lealtad de la clientela se reforzará y la reputación del taller saldrá ganando.